Hay manos que lastiman,
hay manos que roban,
hay manos que matan y causan dolor,
manos que acarician,
y manos que soban, 
manos que te guian por un sendero de amor.

Hay manos que acusan,
manos que señalan,
manos que trabajan fuertes bajo el sol,
y también hay manos que vilmente clavan
un puñal en medio de tu corazón.



Hay manos que cosen,
manos que dibujan
manos que construyen un mundo mejor.
Y también hay manos que impías te empujan
a un mundo de drogas y de perdición.

Pero en este día queridos hermanos
que vienen los días de la Navidad,
justo en estos días quiero hablar de manos
que sólo nos brindan amor y bondad.



Unas manos santas que aún crucificadas
son fuente de vida...son fuente de luz
que para salvarte fueron lastimadas...
te hablo de las manos de nuestro Jesús.

Si la vida es dura y el camino es largo,
y aveces las fuerzas te quieren flaquear,
la carga es pesada pero sin embargo
nunca te detienes a reflexionar.



¿Podrán compararte tus penas sufridas
a lo que esas manos un día soportaron?
En su Santa palma aún tienen heridas
de cuando "por tí" las crucificaron!

Y aún así amigo mío, 
al final de tu existencia
al final de tu camino
vas a encontrar una cruz...
con los brazos extendidos 
lleno de amor y clemencia
sin recordar tus ofensas...
así te espera Jesús.

Autora:  Explotie
© 2000 Derechos Reservados
12-21-00